Levels es una obra generativa que explora una de las fuerzas más influyentes detrás del crecimiento de internet: los videojuegos. La pieza utiliza datos extraídos de plataformas de transmisión en vivo de partidas. El juego en línea ha desempeñado un papel clave en la configuración de la cultura digital y de sus infraestructuras, al mismo tiempo que ha generado problemas significativos en torno a la adicción y las conductas compulsivas de los usuarios. La obra se centra especialmente en los side-scrollers, un género de videojuegos en el que el jugador avanza horizontalmente a través de paisajes en constante evolución.
Estructuralmente, Levels adopta la forma de una escultura compacta y escalonada, que sugiere tanto densidad escultórica como restricción psicológica. Su silueta apilada evoca la arquitectura de un edificio de varios pisos, reforzando la sensación de progresión vertical y de contención. La forma también alude a la noción de la vida como una secuencia de niveles que deben ser escalados, superados o conquistados. La pieza establece un vínculo entre los videojuegos y el panorama del siglo XIX, explorando las similitudes entre estos modos de entretenimiento visual.
Levels explora el impulso cartográfico en el corazón del videojuego. A medida que los jugadores avanzan en un mundo digital, van interiorizando su diseño, aprendiendo cada giro, plataforma y obstáculo. Este acto de mapeo se convierte en una forma de conquista: conocer el terreno significa controlarlo. En este sentido, la obra se alinea con las tradiciones de dominio y exploración visual, planteando preguntas sobre cómo la visión, la cultura del entretenimiento y las formas de dominación visual siguen evolucionando a través de las arquitecturas de la cultura digital.
Estructuralmente, Levels adopta la forma de una escultura compacta y escalonada, que sugiere tanto densidad escultórica como restricción psicológica. Su silueta apilada evoca la arquitectura de un edificio de varios pisos, reforzando la sensación de progresión vertical y de contención. La forma también alude a la noción de la vida como una secuencia de niveles que deben ser escalados, superados o conquistados. La pieza establece un vínculo entre los videojuegos y el panorama del siglo XIX, explorando las similitudes entre estos modos de entretenimiento visual.
Levels explora el impulso cartográfico en el corazón del videojuego. A medida que los jugadores avanzan en un mundo digital, van interiorizando su diseño, aprendiendo cada giro, plataforma y obstáculo. Este acto de mapeo se convierte en una forma de conquista: conocer el terreno significa controlarlo. En este sentido, la obra se alinea con las tradiciones de dominio y exploración visual, planteando preguntas sobre cómo la visión, la cultura del entretenimiento y las formas de dominación visual siguen evolucionando a través de las arquitecturas de la cultura digital.
Medio: Estructura de metal, paneles LED, componentes elecrónicos, ordenador, software generativo personalizado,
conexión a internet
Dimensiones: 19 cm × 31 cm × 87,5 cm
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